Los cultivadores y empresarios asociados a la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma, analizan en su XLV Congreso Nacional la coyuntura y situación actual del cultivo en materia agrícola, de investigación, de comercio internacional y, sobre todo, de las perspectivas que debe afrontar Colombia con motivo del postconflicto tras la firma de acuerdos de paz entre el estado y la insurgencia de las Farc.

El certamen reúne a lo más granado de la dirigencia y de los empresarios del agro colombiano a la vanguardia de la agricultura moderna y por esa razón programaron una visita al Centro Experimental para comparar los niveles de productividad, avance agroindustrial, competitividad e innovación, sostenibilidad, buenas prácticas agrícolas para impulsar una palmicultura responsable, según explicó el presidente del gremio, Jens Mesa Dighinston.

Los asistentes hicieron una visita académica y didáctica al Palmar de la Sierra, centro experimental piloto de Fedepalma, en el Km. 66 Vía Santa Marta-Fundación, sobre la Troncal de Oriente, Municipio de Zona Bananera – Magdalena, para evaluar los avances en gestión ambiental como puente de valor agregado para el negocio.

Es importante destacar, según dijeron varios asistentes al portal web www.amigigosdelcampo.com que ya hay plantas que aprovechan el nitrógeno y que este se convierte en energía eléctrica que se utiliza para ser autosuficientes en la producción de aceite de palma para vender energía a la red nacional.

“Volver proactivo al agricultor, que él mismo genere ideas para que se conviertan en valores agregados que le lleven a provechar todos los recursos de la palma, así como lo que se pueda explotar de la biomasa, de los residuos y del resultado final es una de las ideas”, dijo José Julián Monroy, Superintendente del campo de Palmar de la Sierra.

El gremio realiza especial énfasis entre los asociados para preservar y trabajar las cuencas hídricas, y en el caso del Magdalena se trabaja con Findeter y la Gobernación del Magdalena para construir un distrito de riego que atienda el consumo humano que resuelva las necesidades del cultivo de palma aceitera.

El sector palmero en Colombia, tiene potencialidad en más de 500 mil hectáreas que ya están sembradas de palma en un total de 122 municipio de 22 departamentos y tienen un claro impacto en el empleo, el bienestar y la paz de Colombia