Según cuenta la historia en 1.950 una misión técnica del Banco Mundial (BIRF) identificó la necesidad de invertir en la tecnificación de la agricultura colombiana, la cual se caracterizaba por tener un nivel de mecanización muy bajo y en el que poco se usaban abonos y fertilizantes, entre otras razones porque eran muy costosos. Así fue como en 1.951, gracias a la Misión Agrícola de la Fundación Rockefeller, nació el Centro de Investigación Tibaitatá, conformado inicialmente con el equipo de investigadores del Departamento de Investigación Agropecuaria (DIA) del Ministerio de Agricultura.

Cuando el 31 de octubre de 1.951, el Ministro de Agricultura Alejandro Angel Escobar compró la tierra donde se establecería el Centro Nacional de Investigaciones Agrícola (CNIA) de Tibaitatá, Mosquera (Cundinamarca), que en el dialecto chibcha significa "Cultivos bajo una dirección adecuada", seguramente no se imaginó que su significado, a través de las siete décadas que han transcurrido, se quedaría corto respecto al impacto que ha tenido en el desarrollo e innovación del sector agropecuario colombiano.

Tibaitatá comenzó grande y muy eficiente, en solo seis meses de labores (1952) estableció los programas de investigación en trigo, cebada, maíz y papa, posteriormente se establecieron otros programas de mejoramiento de plantas y en 1955 comenzó trabajos en ganadería, con ganado de leche y luego con ganado de carne, aves, ovinos y patología animal. En 1959 se incorporó la investigación en porcinos y en 1968 en los recursos agua y tierra, maquinaria agrícola e ingeniería de procesos agrícolas.

Año tras año Tibaitatá ha superado los retos propios de generar ciencia, tecnología e innovación agropecuaria en un país como Colombia. No ha sido una tarea sencilla, pero siempre ha contado con el compromiso y el amor por el trabajo, de cada uno de los colaboradores que han hecho posible importantes aportes a la investigación y la transferencia de tecnología agropecuaria en cultivos de clima frío, agricultura protegida, sistemas silvopastoriles, ganadería con razas criollas, apicultura, agrobiodiversidad, agricultura urbana y periurbana, bioproductos, entre otros temas.

Felicitamos a cada uno de los colaboradores que desde hace 70 años vienen transformando, con el poder del conocimiento, de manera sostenible el sector agropecuario colombiano, para mejorar la vida de productores y consumidores colombianos.

Próximamente el comité organizador de la celebración continuará socializando más detalles de la historia y trascendencia de nuestro Centro de Investigación, que tanto nos llena de orgullo.