No es fácil el camino que le espera a los productores de países algodoneros por cuenta de los inventarios en el mercado mundial, la alta oferta de producción, los altos costos y, sobre todo por el estancamiento de los precios en cotizaciones que los mantiene en dificultades ante sus respectivos países que no siempre tiene salvavidas para apoyar subsidios.

En esos términos concluyó la reunión del Comité Consultivo Internacional del Algodón, Ccia, que se reunió en Cartagena, y que con una serie de alertas, llamados de atención y recomendaciones pidió a los agricultores y a los gobiernos asegurar la sostenibilidad ambiental, económica y social del cultivo.

En el encuentro participaron representantes de 70 países de todos los continentes y se expidió una declaración final en la que quedó consagrado de manera dramática el futuro que deben caminar las naciones productoras de la fibra ante la serie de retos que se impone superar.

www.amisgosdelcampo.com publica de forma textual el texto de la declaración entregado al término del encuentro en Cartagena en el que fue despedido, tras 15 años de servicio como director ejecutivo, Terry Townsend, y se anunció a partir del 1° de enero de 2014 al señor José Sette, como director ejecutivo entrante, seleccionado por mérito propio por representantes de 21 países miembros del CCIA. El exto de la declaración es el siguiente:

1. El Comité Consultivo Internacional del Algodón (CCIA) se reunió en Cartagena de Indias, Colombia, del 29 de septiembre al 4 de octubre de 2013 para celebrar su 72a Reunión Plenaria desde el establecimiento del Comité en 1939. La reunión contó con 395 participantes, incluidos representantes de 35 gobiernos y 10 organizaciones internacionales.

2. La política gubernamental está distorsionando la producción, el consumo y el comercio: La Secretaria informó que, para 2013/14, se proyecta que el consumo mundial de algodón quedaría por debajo de la producción por cuarta temporada consecutiva, y que las existencias alcanzarían un nivel sin precedentes. La Secretaria observó que los precios del algodón superan su promedio a largo plazo gracias al apoyo de la política de compras oficiales del gobierno del mayor país productor y consumidor del mundo.

Esa política mantiene los precios locales del algodón en un nivel de aproximadamente 50% por encima de los precios internacionales actuales. Las existencias que mantiene la reserva nacional de ese país representan cerca de la mitad de las existencias mundiales. Al apoyar artificialmente los precios, esa política está socavando la competitividad a largo plazo de la industria algodonera, creando así mucha incertidumbre. Cuándo y cómo se liquidarían esas existencias son factores claves desconocidos que definirían los fundamentos del mercado algodonero mundial en los próximos años.

3. Enfrentando el desafío de la competencia entre fibras: El Grupo de Trabajo del CCIA sobre los Desafíos de las Fibras Competidoras informó que la participación del algodón en el mercado continúa descendiendo y que esa fibra tendría que enfrentarse a la fuerte competencia de las demás fibras en lo que resta del decenio. El Grupo de Trabajo enumeró varios factores que socavan la competitividad del algodón y sugirió una serie de medidas que deberían aplicar los gobiernos, la industria y el CCIA:

a.   Los gobiernos deberían evitar intervenir en los mercados algodoneros dado que las consecuencias dañinas aumentarían la volatilidad de los precios, harían peligrar la inviolabilidad de los contratos, perturbarían el comercio y causarían una pérdida de participación en el mercado a favor de las fibras con precios más estables.

b.   Los gobiernos deberían aumentar la transparencia en las políticas algodoneras y perfeccionar sus sistemas de proporcionar estadísticas, ya que toda incertidumbre relacionada con las políticas oficiales y las estadísticas inadecuadas contribuyen a dicha incertidumbre y conducen a una pobre toma de decisiones.

c.    Los gobiernos deberían garantizar que la industria tenga acceso a instrumentos de manejo de los riesgos de precios.

d.   Los gobiernos deberían introducir y/o hacer cumplir los requisitos de etiquetado que contuvieran el contenido de fibras para que los consumidores pudieran ejercer su preferencia a favor del algodón.

e.   La propia industria algodonera debería dar a conocer los atributos positivos del algodón para el medio ambiente, la economía, y la salud y el bienestar humanos.

f.     La industria algodonera y los gobiernos deberían redoblar sus esfuerzos para mejorar la eficiencia mediante la adopción de pruebas instrumentales normalizadas, desarrollar un sistema normalizado de identificación de fardos, y adoptar el certificado fitosanitario modelo de la FAO.

g.   La Secretaria del CCIA debería asumir un papel más proactivo en respuesta a las críticas públicas dirigidas a la industria algodonera.

El plenario aprobó las sugerencias y solicitó al Comité Permanente que continuara estudiándolas durante el próximo año.

4. Mediciones de la sostenibilidad: El CCIA recibió de su Panel de Expertos sobre el Desempeño Social, Ambiental y Económico de la Producción de Algodón (SEEP, por sus siglas en inglés), un informe titulado “Medición de la sostenibilidad en sistemas de cultivo del algodón: hacia un marco referencial." El SEEP hizo recomendaciones acerca de los indicadores que deberían emplearse para medir la sostenibilidad en la producción de algodón. Los indicadores recomendados comprenden los tres pilares de la sostenibilidad: el social, el ambiental y el económico.

Hubo consenso entre los participantes en la reunión plenaria respecto de que todo marco para medir la sostenibilidad debería implementarse país por país, y que deberían formarse comités en cada uno de ellos a fin de crear el marco inicial de medición y garantizar que dicho marco se actualice a medida que evolucionen las prácticas de producción. La Reunión Plenaria aceptó las recomendaciones reconociendo que el debate sobre la sostenibilidad continúa desarrollándose, y el Comité solicitó al Panel del SEEP que concluyera su informe sobre la sostenibilidad para su consideración por el CCIA.  Los representantes de gobiernos y el sector privado se comprometieron a estudiar la mejor manera de poner en práctica las recomendaciones del SEEP en sus países respectivos.

5. La tenencia de la tierra afecta la productividad agrícola: Se informó al CCIA que en muchos países más de la mitad de las tierras empleadas en el cultivo del algodón es arrendada o tenida como propiedad comunal en el nivel de poblado, lo que tiene implicaciones negativas para las inversiones en regadío, prácticas de conservación de los suelos y otras de índole infraestructural.

Los gobiernos pueden facilitar las inversiones destinadas a la productividad de la tierra garantizando que los productores tengan títulos de propiedad o contratos de arriendo de sus tierras claros y vinculantes, alentando los arriendos a largo plazo en lugar de anuales, y asegurando que los productores tengan acceso a la capacitación, el financiamiento, y los insumos que les permita ser productivos.

Se insta a los gobiernos a que garanticen que los sistemas de tenencia de la tierra se desarrollen mediante un proceso inclusivo de diálogo y consenso con todos los segmentos de la sociedad.

6. Alentando a los jóvenes emprendedores en el algodón: La edad promedio de los productores de algodón en muchos países va en alza. Se observó que los jóvenes a menudo consideran que las profesiones urbanas ofrecen mayores oportunidades económicas y que en muchos países los servicios públicos son mejores en las zonas urbanas que en las rurales. Además, con frecuencia se menosprecian las labores agrícolas.

Los gobiernos debatieron las vías para mejorar las oportunidades profesionales dentro de la cadena de valor del algodón mediante el acceso a créditos, mentorías, aumento del nivel educacional, ampliación de la mecanización, fomento de las cooperativas, y la aplicación de políticas que ofrezcan mayor seguridad en cuanto a la titularidad de la tierra.

7. Aumento de la visibilidad de la mujer en la industria algodonera: Los especialistas observaron que las mujeres proporcionan la mayor parte de la mano de obra en las pequeñas explotaciones algodoneras, incluida la siembra, el desmalezamiento, las aplicaciones de agroquímicos y la recolección. Sin embargo, las mujeres a menudo carecen de acceso a los insumos, los créditos, los servicios de extensión y los mercados, así como que en la combinación de la vida laboral y la vida familiar las mujeres suelen verse sometidas a mayor estrés que los hombres en los empleos dentro de la cadena de valor.

Se instó a los gobiernos a que garantizaran a la mujer acceso a créditos e insumos, derecho a la propiedad sobre la tierra, y apoyo técnico sensible al género. Las costumbres culturales

establecidas que limitan las funciones de la mujer en la agricultura se pueden cambiar por medio de campañas de educación pública. Se solicitó a la Secretaria que estableciera una “Red de mujeres en el algodón” para intercambiar información y desarrollar conciencia sobre las cuestiones relacionadas con el género.

8. Conclusión de la Ronda de Doha: Los miembros del CCIA afirmaron que los asuntos discutidos en la Ronda de Doha conservan su importancia y deben resolverse. El Comité continúa brindando su apoyo a la Organización Mundial del Comercio (OMC) por su papel de promotor de la apertura, por facilitar el imperio de la ley en cuestiones de comercio, por el Entendimiento sobre la Solución de Diferencias (ESD), por sus contribuciones al desarrollo económico, y continúa instando a los gobiernos a que cumplan sus compromisos con la OMC respecto de los subsidios en sectores que compiten con el algodón.

Los miembros del CCIA reiteraron que el algodón es parte integrante del Programa de Desarrollo de Doha (PDD) y que no puede haber conclusión exitosa del PDD sin un acuerdo sobre el algodón. Muchos miembros apoyaron la solicitud de larga data del C4 de que se ponga fin a los subsidios directos que distorsionan la producción y el comercio del algodón.

9. Programas de algodones de identidad: El Comité recibió un informe de su Grupo de Trabajo sobre algodones de identidad establecido para analizar y comparar diversas iniciativas basadas en el algodón. El Grupo de Trabajo informó que la producción de algodón clasificado como orgánico, Fairtrade (Comercio Justo), BCI (Iniciativa por un Mejor Algodón) y Cotton made in Africa (Algodón hecho en Africa) ascendió a casi un 4% de la producción mundial de algodón en 2011/12. El Comité expresó interés en que se le mantuviera al tanto de los acontecimientos relacionados con éstos y otros programas de identidad.

Se dieron instrucciones a la Secretaría para que colaborara con el Grupo de Trabajo con el fin de garantizar la recopilación eficiente de información acerca de la producción, comercialización y fijación de precios en virtud de cada programa, así como para determinar el papel futuro del Grupo de Trabajo. El informe completo del Grupo de Trabajo está disponible en el sitio de la Secretaría en Internet.

10. Promoviendo la eficiencia en el comercio del algodón: El Panel Consultivo del Sector Privado (PSAP) del Comité informó a los gobiernos que la adopción universal del certificado fitosanitario modelo elaborado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la armonización de los conocimientos de embarque electrónicos y la implementación de un sistema común de identificación de fardos aumentaría la eficiencia en el comercio mundial del algodón.

11. Voces múltiples: El PSAP observó el interés manifestado por la Unión Europea de unirse al CCIA. El PSAP instó a los gobiernos a que cuidaran de que las voces múltiples del sector privado siguieran siendo escuchadas por los miembros del CCIA.

12. Disrupciones comerciales socavan la rentabilidad: El PSAP informó que el cumplimiento de los contratos es la base de la rentabilidad e instó a los gobiernos a evitar las medidas que pudieran distorsionar el comercio. Las disrupciones ocasionadas a la comercialización del algodón exacerban los problemas de incumplimiento de contratos, crean competencia desleal y ejercen impactos negativos a largo plazo sobre la cadena de valor del algodón en todo el mudo dado que los hilanderos responden a esas disrupciones reduciendo el uso del algodón en favor de otras fibras.

13. El Comité recibió un informe del gobierno de Argentina acerca de un programa denominado Porocalgodón. Ese programa constituye un esfuerzo por garantizar que la industria algodonera argentina está poniendo en práctica las recomendaciones del CCIA y del Panel Consultivo del Sector Privado. El programa brega por mejorar la transparencia y la rastreabilidad de los fardos, mejorar la calidad del algodón y eliminar la contaminación, elevar los ingresos de los productores mediante el uso óptimo de los insumos, e implementar las pruebas instrumentales estandarizadas del algodón.